sábado, 21 de enero de 2012

"No sabes lo que tienes, hasta que lo pierdes"
Una frase que suena tan cursi y exagerada cuando la escuchamos en las películas o algo así, pero que está TAN en lo cierto. Es horrible sentir ese agujero que queda cuando alguien se va. En especial esas personas que no tienen fecha de retorno. ¿Cómo podemos estar seguros de que en algún momento se les va a dar por volver? Pueden pasar semanas, meses y no saber nada. Y en ese momento es cuando inflamos el pecho y decimos "Bueno, que se cague. No me importa si no vuelve, yo tengo que seguir con mi vida", pero no importa cuanto nos tratemos de convencer, sabemos que no podemos, al menos no a corto plazo. Y yo misma me obligo a no seguir escribiendo sobre esto porque lo único que hace es tirarme el autoestima a la mismísima mierda; porque me hace consiente de que estoy tratando de aplicar este concepto en mi, por más estúpido que sea...


Igualmente me veo obligada a objetar la frase que mencioné primero. Hay veces en las que nos separamos de alguien por mucho tiempo, un amigo/a a lo mejor y por momentos ni nos acordamos de que existe. Pero llega el momento en que lo volvemos a ver y pensamos "wooooww, dónde estuvo todo este tiempo?" Y nos damos cuenta que no lo extrañamos, pero después de que nos separamos de nuevo, no vemos la hora de juntarnos con él/ella otra vez. 
En conclusión, creo que hay veces que no nos damos cuenta lo que teníamos hasta que lo volvemos a encontrar. Raro no? :) 


No hay comentarios:

Publicar un comentario